Jorge Mario Bergoglio fue electo Papa en uno de los periodos más críticos para el Vaticano, y ha tenido que lidiar con tres problemas apremiantes: las acusaciones de pederastia en el seno de la Iglesia, la presunta corrupción en el Banco Vaticano, y los supuestos nepotismo y favoritismo en la estructura de liderazgo de la institución.

FRANCISCO,  ¿El Papa reformista?